Es cautivador el efecto que provoca en mí, la suelo escuchar cuando estoy algo deprimida o nerviosa. Sencillamente el contenido me hace transportarme lejos de donde estoy. Y cuando acaba, yo me siento mucho mejor, a veces ni recuerdo el porque me sentía triste.
Me sucedió algo curioso en el colegio con esa canción.
Mis amigos y yo nos tendimos en el pasto a descansar depués de la clase de deportes y a mi se me ocurrió poner la canción para renovar nuestro ánimo-como suele decir un amigo-. Una profesora iba pasando por ahí y al escuchar la canción se puso como loca, nos regañó alegando que la canción que estabamos escuchando era cosa del diablo y no sé que tanta tontería. Nos mandó a la dirección por "alterar el orden"
Al final el director no dijo nada, y así tenía que ser pues no habíamos hecho nada malo. Aunque la ancianita aún nos guarda rencor
Qué va! Tanto drama para nada.
En fin, soy adicita a Tomorrow never knows
